miércoles, 4 de enero de 2017

Que bueno que volviste, Fernando



Hoy es un día donde recordar, hace dos años volvía aquel niño que en 2007 dejaba la familia colchonera, y volvía crecido, después de ganar competiciones, de madurar fuera de casa, de vivir muchas experiencias, pero siempre de la mano de los colores rojiblancos.

Puede que doliera mucho su marcha, puede que entre la afición hubiera gente que no se lo perdona, pero ahí empezó el despegue del Atlético, el ayudó a forjar el Club que tanto quiere, se fue buscando fútbol, algo que a orillas del Manzanares en aquellos años brillaba por su ausencia, y nos dejó un gran vacío, pero siempre agradecidos.

Agradecidos de su compromiso con este equipo desde que llegara, agradecidos de lucir el escudo aún estando a miles de kilómetros de casa, siempre acordándose de donde venía y a donde pertenecía, aunque en ese momento no se encontrara en ese lugar.

Fernando, volaba del nido, como muchos otros jóvenes hacen ahora y cuantas lagrimas dejaba entre los asientos del Calderón el día que se hacía oficial -entre las que me incluyo-, se iba el ídolo de aquellos niños que veían al Atleti desde Torres, aquel que le había hecho enamorarse de aquel atleti que no tenía su identidad, que ni el mismo se reconocía.

Pero ocho años después volvía, volvía para reencontrarse con aquellos niños que tan tristes dejó y que habían crecido tanto como él, con aquellos que siempre le apoyaron desde la lejanía, volvía para marcar su gol número cien con esta camiseta, para ese penalti ante el Bayer Leverkusen, para aquel gol y esa expulsión en el Camp Nou, para llevar al Atlético junto a sus compañeros a la final de la Champions, para volver a llorar -ahora desde el campo- una nueva derrota, volvía para dar todo por ese escudo que tanto quiere, tanto como lo hacemos nosotros. Gracias por hacernos recordar, por volver a corear tu nombre, GRACIAS FERNANDO.

martes, 27 de diciembre de 2016

El repaso al dibujo del Atlético en 2016



Cuando termina un año, los recuerdos afloran, los balances son necesarios, aparece la nostalgia de lo que se queda y los propósitos de lo bueno que vendrá, las ilusiones de cuando empiezas la primera página del libro. Tienes una nueva oportunidad de cambiar lo que no te ha gustado y que no querrás que te acompañe en el nuevo año.

Se termina el 2016, pues recordemos. Cincuenta y seis han sido los partidos disputados por el Atlético de Madrid en este año de buenas y malas sensaciones. Treinta y siete partidos en la competición liguera, entre la pasada temporada y la actual. Veinticuatro victorias, seis empates y siete derrotas, estos son los números. Aquí ya contamos con los encuentros del final de la competición liguera que comenzaba en 2015 y que para el Atleti terminaba este año siendo una carrera a fondo, de la que se descolgó al final, pero aguantó bien, un digno y molesto rival para los de arriba, de nuevo, un año más estando ahí. Sin embargo, en los partidos de la presente temporada las cosas no terminan de encajar, ha perdido 20 puntos en los dieciocho partidos que ha disputado hasta el final del año, pero todavía queda mucho, y ya sabemos como es el Atlético.

Y ahora, cambiamos. De los cincuenta y seis encuentros, seis han ido para la Copa del Rey. Rayo Vallecano y Celta de Vigo para la pasada campaña de la competición, con una victoria, dos empates y una derrota. Caía ante el equipo gallego en el Vicente Calderón en cuartos de final merecidamente, poco se disfrutaba a orillas del Manzanares de esta competición nacional. Este año por el momento solo han jugado dos partidos ante el Guijuelo, con dos victorias que le llevan a octavos de final, pero ya en el próximo año.

Y claro, como olvidarnos de la Champions. En total trece partidos, siete para la temporada  pasada y seis en esta, dejando las cifras de siete victorias, tres empates y tres derrotas. Sí, quizás el pasado será mejor no recordarlo mucho, quizás mejor directamente olvidarlo, o simplemente agradecer las grandes noches que vivimos gracias a la competición europea. Esas citas en el templo donde vibramos, disfrutamos y nos sentimos siempre orgullosos de ser nosotros; todo el mundo hubiera querido cambiarse a nuestro lugar, pero lo merecíamos. Los penaltis ante el PSV, la gran remontada ante el Barcelona, derrotar al gigante Alemán, y tanto, cuanto sufrimos ante el Bayern, que grandes momentos y como disfrutamos con los nuestros. Pero llegó la final y volvió a suceder, la suerte no estaba de nuestra parte, como de costumbre en estos casos. Y volvimos a sufrir, y volvimos a bajar de las nubes y nos quedamos sin la primera Champions, pero siempre orgullosos. Y claro, este año lo volvemos a intentar, primeros de grupo en uno que a priori no parecía nada fácil y sí, en 2017 nos espera el Bayer Leverkusen, volveremos a luchar.

Basicamente, de nuevo otro año, con estos colores, con este escudo, con esta familia. De nuevo han sido muchas tardes, noches, también mañanas. Momentos muy buenos y también muy malos, previas, la música al entrar al Calderón, las risas con los atléticos, las despedidas, el nuevo estadio, el nuevo escudo, cosas en las que todos estamos de acuerdo, discrepancias entre los asientos, llantos, saltos de alegría, abrazos sinceros, anécdotas y tantas cosas más. En definitiva, un año más a orillas del manzanares, el último que terminará aquí, brindemos por él, aunque siempre estará presente. Estadio Vicente Calderón. Adiós 2016.

Imagen: Draw my life (Fernando Torres)

martes, 20 de diciembre de 2016

Hoy, se cierra el 2016 para el Vicente Calderón




Con la mente puesta en las vacaciones y con las malas sensaciones que dejan este último tramo del 2016, el Atlético de Madrid cierra su último partido en el Vicente Calderón en la Copa del Rey, ante el Guijuelo, partido de vuelta de trámite por la gran ventaja que traen los colchoneros de su partido de ida como visitante (0-6).

Hoy de nuevo hay fútbol a orillas del Manzanares, donde los aficionados podrán despedirse de un año en el que llegaron muchas alegrías, pero también recibieron algunas desilusiones, que quedarán ahí, pero que siempre son mejores siendo de este equipo, incluso que la mayor de las victorias con cualquier otro.

Hoy, esto es en lo que deben pensar los colchoneros, en el momento que viven, que deben estar unidos, que las cosas siempre vienen por algo. Quizás ahora no lo verán así, pero no siempre se puede estar arriba, y lo que este equipo te enseña a lo largo de la vida, es que caerse está permitido, pero levantarse es obligatorio.

Aquí, con el 2016 se cierra una etapa, una más. Viene un año importante para el Club, un año lleno de emociones nuevamente, un año de cambios y de despedidas. Lo que seguro que traerá este 2017 es momentos únicos, que quedarán de por vida entre las gradas del Vicente Calderón, recuerden, disfruten y vivan cada segundo que queda en este estadio de la manera más intensa posible, porque este será un año que no podremos volver a vivir, ni recuperar.

miércoles, 14 de diciembre de 2016

Atleti, ¿sí yo cambio, todo cambia?



Wanda Metropolitano, y con tan solo dos palabras saltaban las alarmas en todo lo que tiene que ver con el Atlético de Madrid. Miles de especulaciones durante meses, unos pedían Luis Aragonés, otros simplemente Nuevo Vicente Calderón, ¿por qué cambiar algo que tenemos tan interiorizado? Y ninguna de las peticiones que se pedían llegaba. Nada de nombres publicitarios, pues Wanda, y dejando una parte de la historia, Metropolitano, cosa que no se esperaba, y dicen que los cambios asustan.

Parece ser que sí, en un primer momento nadie estaba contento, donde yo misma me incluyo. Puede que nunca estemos de acuerdo, pero el fútbol está cambiando, los intereses empiezan a ser otros y los equipos antes o después tienen que seguir el camino. Renovarse o morir, puede que estemos o no de acuerdo las cosas tienen que avanzar, pero ¿que es lo importante el atleti o lo que lo rodea?, ¿la esencia o las publicidades?, ¿los aficionados de toda la vida o los que empiezan a unirse por los nuevos horarios al otro lado del mundo?, creo que no hace falta respuesta.

La realidad es que la vida cambia, el fútbol no iba a ser menos, pero nosotros hacemos que lo importante siga siendo lo que nos diferencia del resto, nosotros. Los cambios normalmente no gustan, pero si lo importante es el equipo, los colores y la pasión que caracteriza al Atleti, ¿es necesario sacar fantasmas del pasado utilizando la frustración del estadio y del escudo?. Muchos aficionados del Atlético de Madrid, y como en todo, cada uno un mundo. Cada cual hace suyo el Club a una manera, no nos tomemos la libertad de creer que nuestra visión es la única buena.

No veo necesario el cambio de escudo, el estadio probablemente podría tener un nombre más adecuado que hubiera gustado a la mayoría de los colchoneros, las cosas podrían ir mejor y así infinidad de cosas, pero el equipo que más alegrías nos ha dado en los últimos años no pasa por su mejor momento, ahora hay que presumir de afición, de valores. Todos juntos, es la única forma de salir de lesiones, derrotas y falta de identidad. Solo puedo decir, que juntos hacia la victoria, solo así volveremos a ser el Atlético de Madrid.

jueves, 24 de noviembre de 2016

La Champions ayuda a olvidar a orillas del Manzanares



El duro tropiezo ante su rival en la capital el pasado fin de semana, llegaba en la mente de los colchoneros en la previa del partido ante el PSV. No habían pasado ni cuatro días y ya estaban de nuevo, para pasar página del derbi, para la Champions League. En una fría noche en Madrid, pero con un caluroso recibimiento de los aficionados.

El atlético salía con actitud al campo, empezado con la decisión de Diego Pablo Simeone, volviendo a meter a Tiago en el doble pivote con Gabi. Puede que una reacción tras la última derrota o quizás por las dudas que venía sembrando la plantilla con el juego en los últimos partidos. Fuere como fuere, la imagen de los rojiblancos en el campo volvía a la esencia del Atlético de Madrid. Esa esencia que tantas alegrías ha sembrado en el césped del Calderón. Esto que pedían esos hinchas que tanto sufrían días antes en los mismos asientos.

Pese al esfuerzo y las buenas sensaciones, el primer tiempo no trajo ningún gol a las redes rojiblancas. Aún con ocasiones y peligro de los del Cholo, las oportunidades no terminaban de aprovecharse. Pero, otra vez volviendo a la esencia, en una contra de libro del Atlético, llegaba el primer gol al marcador; Kevin Gameiro culminaba con un disparo cruzado desde el lado derecho del área, una gran galopada de su compatriota Antoine Griezmann, llegando aquí el primer tanto del delantero en Champions con la elástica rojiblanca. 

El esfuerzo daba sus frutos y con menor presión desde el gol, el Atlético no bajaba la intensidad, seguía alerta. Lo que hizo que tan solo diez minutos más tarde, Griezmann igualando a goles en la Champions a una leyenda, Luis Aragonés, ponía la guinda al pastel. Con esta victoria el Atlético de Madrid firma el liderato de la fase de clasificación de grupos de la competición europea, con un pleno al quince, cinco partidos con cinco victorias. Dejando grandes sensaciones en las noches de Champions en el Vicente Calderón.




domingo, 20 de noviembre de 2016

Las despedidas nunca fueron buenas, pero el legado será eterno


Luces, cámara y acción, a una noche que no sería lo que ninguno de los presentes esperaba. Aledaños al completo, cervezas entre amigos recordando todos los derbis vividos a orillas del Manzanares, himno a capela y una imagen en las gradas del fondo sur, a la que le acompañaba "nuestro legado será eterno". Piel de gallina, todos coincidíamos, empezaba la cuenta atrás.

Aunque nos las creiamos felices, ni el Atlético era el equipo con garra, con el sentimiento de los últimos años, que derrocha coraje y corazón, y esto hacía que inevitablemente los recuerdos volaran a años atrás. Ni el ambiente tapaba la fría noche de Madrid, el mal partido de los colchoneros, el equipo y su desgana lo trasmitían a todos y cada uno de los asientos del estadio, que tampoco tuvieron su noche.

Ese Vicente Calderón que acogía el último derbi liguero entre sus gradas, la ocasión no lo merecía, pero a veces las que crees que serán las mejores noches, acaban de la peor manera, metido en la cama, con pijama y con las ganas de haber llegado de día. Esa sensación invadía a una afición que buscaba poner el sello a una de las últimas citas importantes en el templo, pero las cosas a veces no salen como uno quiere.

La vida sigue, pensar, aprender y levantarse. El rival hizo mejor los deberes, todos coincidían tras el pitido final, lo que más dolía no era el qué, si no el cómo. La sensación de volver a sentirse ninguneado por esos vecinos que no saben lo que es la palabra tacto. Pero no se preocupen, el que tuvo, retuvo y quedan muchas noches de magia en el Calderón. Aunque prefiero perder contigo, eso siempre.


miércoles, 16 de noviembre de 2016

El último derbi en el Calderón



Juega cada partido como si fuera el último.


Aquí comienza la cuenta atrás, empieza a brotar la palabra último en los alrededores del Manzanares.
La temporada comenzaba, y el final se veía lejano, ya tendremos tiempo para llorar, nos decíamos; pero el primer choque de realidad ha llegado.

Tantos y tantos derbis, ese ambiente inigualable comparado con otros partidos, y aquí está. Este fin de semana esta parte de Madrid se prepara para una de esas grandes noches, en un año donde el Calderón cumple 50 años. Se unen todas las condiciones para que sea un encuentro de reyes, como los de antes. 

En esta jornada 12 de la Liga Santander de la temporada 2016/17 termina una etapa, los indios no volveremos a bajar a orilla del manzanares para conquistar la capital, en este duelo liguero por excelencia, con nuestro rival más directo, nuestros vecinos, el año que viene les tendremos que enseñar nuestra nueva casa. 

"50 años del Vicente Calderón"

Todavía quedan muchos duelos en nuestro estadio, muchos para poder despedirnos como se merece. Pero los meses van pasando y cuando el sábado el Atlético de Madrid y el Real Madrid se vean las caras en el césped, de aquel templo que estará vestido con sus mejores galas y sin un asiento vacío, simplemente porque todo el mundo quiere estar presente en esta última cita para el grandioso Vicente Calderón. Sí, después todo habrá acabado. Seguirá siendo en un nuevo lugar, pero no en este estadio que tantos derbis ha acogido. 

Después se apagarán las luces, las luces de 66 partidos entre ambos disputados a orillas del Manzanares, donde tras un partido seguro apasionante, por todo lo que significa, se pondrá el punto y final a una parte de la trayectoria de este estadio. Donde se ha escrito mucha historia y que le cede su lugar a un sitio nuevo, una nueva casa que será participe de muchos sueños e ilusiones en rojo y blanco.